A mitad de camino entre Bolea y Loarre aparece sosegada la estampa de Aniés.
En su callejero nos topamos con interesantes casas nobiliarias del siglo XVII y XVIII, y con su iglesia parroquial de San Esteban, que como en otras poblaciones de la comarca, aunque su origen se encuentra en el siglo XII y en el estilo románico, siglos posteriores la han ido modificando su perfil y enriqueciendo su estructura e interior.
Sin embargo, el apasionante reclamo de Aniés es la espectacular ermita rupestre de la Virgen de la Peña, un santuario de gran devoción en la zona. Situada en una roca, dando la sensación de sostenerse en el aire, la ermita enmarca una de las oquedades visibles en la cara sur de la sierra Caballera.
También en la misma sierra se encuentra la ermita rupestre de San Cristóbal, con acceso desde Aniés y desde Bolea. Y es que el pueblo es surcado por variadas e interesantes rutas: el camino hacia el castillo de Loarre, la tercera etapa del camino natural de la Hoya de Huesca, el camino hasta Rasal…
La localidad celebra sus fiestas el 9 de mayo por San Gregorio, el 6 de agosto por San Esteban, y la especial romería a la Virgen de la Peña.
